La iniciativa europea en la que participa la UCO busca desarrollar nuevas variedades de olivo que sean resistentes a la bacteria
Life Resilience, el proyecto cofinanciado por el programa Life de la Unión Europea, cuyo principal objetivo es la prevención de Xylella fastidiosa en explotaciones de alta densidad tanto de olivar como de almendro, ha elaborado un documento que recoge información clave para los agricultores destinada a esa lucha. La Xylella fastidiosa es una bacteria fitopatógena que no solo ataca sin curación al olivo y al almendro; también es letal para otras plantas como el ciruelo, el melocotón y el limonero, así como a otras que no producen frutos, como el laurel.
Ese documento que Life Resilience pone a disposición de los agricultores recopila una serie de prácticas agrícolas sostenibles que pueden utilizarse para reducir de manera eficaz la incidencia de la bacteria en sistemas intensivos de olivar y almendro. Uno de los objetivos del proyecto es desarrollar variedades de olivo que sean lo más tolerantes posible a Xylella fastidiosa así como a otros patógenos, minimizando las pérdidas que hasta ahora conlleva tener una plantación infectada. Además se persigue implantar prácticas sostenibles que contribuyan a prevenir la propagación de la bacteria y aumenten la resiliencia del cultivo frente a plagas y patógenos.
Este material estará disponible en cuatro idiomas (castellano, inglés, italiano y portugués) y se estructura en diferentes puntos de actuación en los que trabajar para mitigar el efecto de la bacteria en cultivos agrícolas sensibles y de gran importancia económica en todo el mundo.
Las prácticas agrícolas mencionadas abarcan desde los insectos vectores y las plantas huéspedes de Xylella fastidiosa, hasta los microorganismos que protegen a la planta de posibles enfermedades, incluyendo también el control de los vectores mediante la fauna auxiliar establecida en las explotaciones agrarias. Considerando la gran amenaza de la bacteria, “es de gran importancia que los agricultores estén al corriente de la investigación que se realiza y de este tipo de publicaciones para poder proteger de forma efectiva sus cultivos”, como explica Nuno Miguel Vitorino, ingeniero agrónomo de Nutriprado, socio implicado del proyecto Life Resilience, que ha participado en la elaboración de este documento de referencia.
Prevention of Xylella fastidiosa in intensive olive & almond plantations applying productive green farming practices es un proyecto que tiene por objetivo buscar prácticas sostenibles y productivas para la prevención de Xylella fastidiosa en las plantaciones de olivar y almendro en intensivo y alta densidad. Liderado por la empresa Galpagro, cuenta con la participación de la Universidad de Córdoba (UCO), Agrifood Comunicación, Greenfield by Agrodrone, Asaja, Nutriprado, SAHC-Sociedad Agrícola de Herdade do Charqueirao, S.A.; Gruppo Salov y el Istituto per la Valorizzazione del Legno e delle Specie Arboree (Ivalsa), perteneciente al Consiglio Nazionale Delle Ricerche de Italia.
Este ambicioso proyecto cuenta con la participación de tres países (España, Italia y Portugal) lo que hace que sus comités de seguimiento sean claves para que todas las fases del proyecto cumplan los tiempos determinados y se implanten las medidas más eficaces para mejorar la productividad y sostenibilidad de los sistemas implantados en las tres fincas demostrativas: El Valenciano, en Carmona (España); Charquerao, en Alandroal (Portugal); y La Traversagna, en Pisa (Italia). Los nueve socios participantes involucrados en la investigación, control y propuesta de medidas de prevención de Xylella fastidiosa han realizado avances en los últimos tres meses del proyecto.
Se ha realizado el inventario de suelos con un procedimiento de trabajo llamado MAP2SOIL, realizando una prospección de las tres fincas mediante geosensores y el uso de drones que han trazado mapas de variabilidad espacial que permiten obtener la información detallada de cada parcela y analizar en laboratorio agronómico los principales parámetros edáficos y microbiológicos de los suelos y cultivos. Gracias al uso de la agricultura de precisión (sensores, cámaras térmicas e infrarrojas, drones y satélites), los investigadores pueden evaluar la respuesta de los cultivos a las distintas estrategias del proyecto, analizar la actividad fotosintética del cultivo, evaluar si presenta algún tipo de estrés y determinar de manera precoz la aparición de la enfermedad en los cultivos.
Originaria de California, donde se descubrió hacia final del siglo XIX, hasta la fecha no existe ningún antídoto que sea eficaz contra la Xylella fastidiosa. A final de junio de 2017 se hizo pública la detección de la bacteria por primera vez en España. Fue en almendros de Guadalest (Alicante).
Fuente:
eldiariodecordoba.es