12 mayo, 2010

D. O Montoro Adamuz

El aceite de oliva que se produce en los términos de Adamuz, Montoro, Espiel, Hornachuelos, Obejo, Villaharta, Villanueva del Rey, Villaviciosa de Córdoba y el término de la capital situado al norte del Guadalquivir tienen el privilegio de poder contar con un sello de calidad bajo la Denominación de Origen Montoro-Adamuz que certifica la calidad y características propias de este zumo de aceituna extraído de los olivos de estos municipios.
En total, la comarca que conforma la D.O. se extiende por 55.000 hectáreas de la Sierra Morena cordobesa.
El Consejo Regulador de esta Denominación de Origen es muy joven ya que comenzó su andadura a principios de 2008 y por tanto se encuentra en estos momentos potenciando la integración de las cooperativas, almazaras, productoras y envasadoras, según detalla el director técnico del Consejo Regulador, Antonio Terán.
No obstante, en estos momentos Montoro-Adamuz cuenta con las cooperativas productoras de cada municipio, (dos en Montoro), que se presentan bajo una misma marca, Cordoliva Selección, envasada por el Grupo Hojiblanca. Además, existen otras pequeñas industrias no integradas en Hojiblanca con marca protegida como Hacienda Meca y otras empresas en proceso de consolidación como Aceites la Serrana y Lagar de Quiros.
Terán dice que han sido dos años de «duro trabajo» para obtener el reconocimiento definitivo por parte de la Comisión Europea mediante estudios de caracterización del Aceite de Oliva Virgen Extra Montoro-Adamuz que han demostrado la especificidad de los mismos.
Beneficioso para la salud
En concreto, uno de esos estudios ha demostrado que los aceites de esta Denominación de Origen tienen un alto contenido en polifenoles, lo que los convierte en unos productos ricos en agentes antioxidantes naturales, aportando beneficios muy importantes para la salud.
En el estudio se comparan los niveles de compuestos polifenólicos de los aceites de la D.O. Montoro-Adamuz con niveles de polifenoles en aceites de otras zonas productoras y en donde la variedad de olivo picual es la más predominante.
Los resultados obtenidos demuestran también la influencia de la variedad nevadillo negro en la composición de polifenoles de los aceites.
Asimismo, las condiciones edafoclimáticas del olivar de sierra en la zona de influencia de la D.O. fuerzan una situación de estrés en el olivo que repercute en un aumento de la concentración de dichos contenidos fenólicos.
Todo ello redunda, según este estudio, en que los aceites Montoro-Adamuz presenten los mayores contenidos en polifenoles que son muy beneficiosos frente a patologías y dolencias como la inflamación, la trombosis o la hipertensión arterial.
Según el director técnico de la Denominación, Antonio Terán, estos beneficios hacen que el aceite de oliva virgen obtenido en las estribaciones de la Sierra Morena cordobesa sea de una gran garantía en su calidad y origen.
Asimismo, señala que la obtención de la Denominación de Origen supuso un paso importante para el reconocimiento a un producto «que es conocido y apreciado históricamente en el comercio» por unas cualidades y características de calidad específicas, «y con las que estamos intentando proteger unos olivares centenarios que, por sus condiciones agroambientales y de cultivo, son un patrimonio histórico vivo».
Las excelentes cualidades y propiedades del conocido como «oro verde» no evitan que el sector afronte una situación crítica que, según Terán, se debe a la falta de liquidez por parte de los agricultores para afrontar la campaña y al hundimiento de los precios debido a la posición dominante de los distribuidores respecto a los productores.
Fuente:abc.es

2 comentarios :

Anónimo dijo...

Bien...correcto. Un marchamo comercial. La pregunta es si comercialmente es capaz de tener más capacidad de penetración, o por el contrario tenemos a un consumidor despistado con tantas DOs.

Anónimo dijo...

Las DO en el vino u otro producto no parecen despistar al consumidor. Si el organo regulador hace bien su trabajo (control de calidad, Nº,...) solo puede potenciar la buena fama del producto, despues es al consumidor aceptar el producto o no.