La familia López Sánchez compra todas las acciones de Óleo Martos

La familia López Sánchez-Polaina ya posee el 100% de las acciones de Óleo Martos, que es una de las envasadoras de aceite de oliva más potentes del sector. Se trata del primer paso de un ambicioso plan de reestructuración para evitar que una “deslealtad” del socio fundador perjudique a la empresa.

Óleo Martos tiene unas cuentas y un posicionamiento en el mercado, realmente, envidiables. Cuenta con un capital social de 3,5 millones de euros, una facturación anual de 90 millones después del cierre del último ejercicio y unas ventas de 23 millones tras las cuentas de julio. Posee una envasadora, bodegas de vino en Manzanares, una planta de cerámica y vende aceite en Gran Bretaña, Suiza, Alemania, China, Polonia, Holanda, Dinamarca, Francia, Japón, Sudáfrica y en diversos países de Europa del Este y América. Además, con un crecimiento muy importante.
Sin embargo, ahora tiene un serio problema que, si no se soluciona, podría dañar seriamente una de las empresas familiares más importantes de Jaén. De hecho, tiene una plantilla de 87 trabajadores que llega al centenar si se contabilizan los que trabajan en Castilla-La Mancha. La familia López Sánchez-Polaina ha llevado al juzgado con una querella criminal al que fue su socio fundador —hace doce años— y que manejó el 35% del accionariado. Óleo Martos indica que, en mayo, se detectaron unos impagos de la empresa que era accionista y con la que trabajaba de la mano.
Precisamente, esta situación ha terminado en los tribunales, ya que la familia López Sánchez-Polaina considera que hay una intervención delictiva de su anterior socio, por lo que lo ha puesto en manos de sus abogados. Pero, Óleo Martos indica que estos impagos le han generado un problema financiero que tiene que solucionar. Si se visitan las instalaciones, se constata que la fábrica funciona con total normalidad. La gente trabaja y cobra, se atiende a los clientes de la misma manera y sus directivos tienen en marcha proyectos ambiciosos que contribuyan al plan de internacionalización que tienen en marcha desde hace años.
Sin embargo, la familia López Sánchez-Polaina busca financiación para que este problema coyuntural —ya que la estructura de la empresa tiene buena salud— no finiquite sus negocios. De hecho, en las conversaciones que ha mantenido ya con algunas entidades financieras deja claro que el dinero se devolverá en el calendario establecido o, incluso, antes porque tiene esperanzas de que la batalla legal que ha emprendido le otorgue buenos resultados, ya que considera que cuenta con pruebas suficientes.
negociación. Óleo Martos ha diseñado un plan de financiación para salir de este problema que ya dispone del visto bueno de, al menos, tres entidades de crédito. Sin embargo, requiere más apoyos para garantizar el éxito. Por ello, la empresa asegura que ha encontrado una fiel colaboradora en la alcaldesa de Martos, Sofía Nieto, que, además, está representada en los órganos directivos de Unicaja después de que se produjera la fusión con Caja de Jaén. Asimismo, la familia López Sánchez-Polaina ha contactado con el Gobierno de Andalucía, que estudia su caso dentro de los programas de financiación que tiene en marcha. No hay que olvidar que se trata de una de las comercializadoras de aceite de oliva más importantes del país, que tiene un interés estratégico en la provincia jiennense. Asimismo, un centenar de familias depende de su actividad, que se mantiene en España y en el extranjero sin problemas, y con una tendencia ascendente.
Fuente:diariojaen.es