Ha llegado el momento de dejar de lamentarse por las altas producciones de aceite de oliva, lo que será una constante en el futuro, y centrarse en un dato que ha pasado casi desapercibido en los medios de comunicación: en marzo salieron de las almazaras españolas hasta 130.000 T de aceite de oliva, con record histórico de exportaciones incluido.
Después de que la Agencia del Aceite de Oliva hiciese público su informe de marzo y analizando esta semana la prensa, especialmente generalista, nos encontramos con grandes titulares que siempre hacen mención a la gran producción que habrá en la actual campaña de aceite de oliva y que se situará por encima de todas las previsiones.
El País titulaba “La producción de aceite alcanza niveles récord”, lo cual no es verdad, Ideal abría con “La producción de aceite se dispara en Jaén y dificulta la recuperación de precios”, son sólo dos ejemplos de una tónica, pero nadie, ningún medio, hacía mención a un dato emitido por la misma Agencia y que es realmente el único record que se está batiendo esta campaña: son las espectaculares salidas de aceite, ratificadas en el mes de marzo, y el record absoluto e histórico de exportaciones de aceite de oliva español en la presente campaña que está siendo, hasta el momento, un 34% superior a la media de las cuatro últimas campañas.
Cierto es que nadie, o casi nadie, esperaba que nos fuéramos a 1.400.000 T de producción en la presente campaña, pero tenemos que ser conscientes de que estas serán las producciones futuras en nuestro país y, lejos de lamentarnos, debemos centrarnos todos en vender aceite, en consolidar las salidas y en analizar su comportamiento.
Una simple cuenta aritmética, que es sumar doce veces las ventas de éste mes marzo, nos llevarían a una comercialización total superior al millón y medio de toneladas, capaz por tanto de absorber la actual producción.
Así pues hagamos, al menos desde aquí, esta lectura positiva y esperanzadora de los datos porque si conseguimos mantener cada mes estas ventas, y hacerlas estructurales, no habrá desajustes a los que temer.
Fuente:AEMO.es
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