La producción española de oro líquido, con Asturias entre las regiones - a la cabeza en consumo, bate récords de ventas y exportaciones
"El Mediterráneo acaba donde el olivo
deja de crecer", asevera un dicho popular. En cambio, el mercado del
aceite que nace de la aceituna nada en la abundancia y extiende la
producción de las almazaras a más de un centenar de países en los cinco
continentes.
Las cifras de ventas de la campaña actual, iniciada
en octubre, superan los niveles históricos del ejercicio 2011-2012, uno
de los más brillantes para el oro líquido español desde hace años. La
salida del producto al mercado interior y exterior alcanzó el pasado
diciembre 123.200 toneladas, cuando en las mismas fechas de 2011 fueron
121.700.
El auge del aceite se cocina a tres bandas, porque el
aumento de la producción va acompañado de un incremento en la
comercialización y en las exportaciones. Asturias, región sin tradición
olivarera del Arco Atlántico, donde por lógica debería reinar la
mantequilla, contribuye a la prosperidad de los olivares, ya que es una
de las cuatro comunidades españolas que alcanzan un consumo más alto per
cápita, solamente superada por Cantabria, Castilla y León y Galicia.
Los
asturianos ingieren 11,9 litros de aceite por persona al año, cifra
superior a los 9,7 de media en España. El gasto ronda los 30 euros por
persona y año, frente a los 23,8 euros de media nacional, según datos
del informe de Mercasa sobre consumo alimentario en España.
En
diciembre la Agencia de Información y Control Alimentarios cifró que el
aceite producido en los dos primeros meses de campaña ascendía a 170.400
toneladas, un 81 por ciento más que el obtenido en la campaña anterior.
Las salidas de aceite envasado representan el 56 por ciento del total
comercializado en el mes de noviembre y el 54 por ciento de los dos
meses de campaña. Las exportaciones, con datos todavía provisionales
para octubre y noviembre, se cuantifican en 143.000 toneladas, con un
aumento del nueve por ciento respecto a la campaña anterior y del cinco
por ciento en relación a la media de las cuatro últimas campañas.
España
es el primer país productor mundial de aceite de oliva, con 800.000
toneladas anuales. Más de 300 millones de olivos cubren dos millones de
hectáreas en las que Andalucía suma la mayor superficie, seguida, a
considerable distancia, por Castilla-La Mancha, Extremadura, Cataluña y
el resto de España. Y es en ese "resto" donde aparecen experiencias
interesantes como la del aceite gallego de zonas como Quiroga y
Valdeorras, que gana prestigio internacional. El olivo llegó a la región
vecina en la Edad Media de la mano de los romanos, pero los Reyes
Católicos ordenaron su tala para favorecer económicamente a las regiones
del Sur. Se conservó en áreas de difícil acceso y ahora resurge.
Sigue:lne.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario