COAG considera que las previsiones optimistas no se van a cumplir, debido a que las tres últimas campañas han estado en la media o por encima, lo que, unido a la falta de lluvias de mayo y al calor de junio, imposibilita una gran cosecha. Con un stock prácticamente inexistente, si la campaña se retrasa por circunstancias climatológicas, puede faltar aceite.
COAG Andalucía ha presentado hoy las primeras estimaciones para la campaña de aceite 2009/2010. Con los datos que ha podido recabar esta organización agraria, se puede adelantar que no se cumplirán las previsiones optimistas que auguraban una gran cosecha, sino que, antes al contrario, la próxima será una campaña en la media de los siete últimos años. COAG considera que, después de tres años con cosechas en la media o por encima, la vecería imposibilita una gran producción. A ello habría que sumarle que en el mes de mayo apenas ha llovido y en junio ha habido varios golpes de calor que han provocado un descenso en la producción, sobre todo en algunas zonas. Esto significa un nuevo varapalo para los olivareros, un sector que lleva meses sufriendo una situación límite, con una crisis de precios en origen que amenaza seriamente la viabilidad de muchas explotaciones.
Además, esta organización agraria ha advertido que, si la campaña se retrasa por razones climatológicas, dado que el stock existente es prácticamente nulo (menos de 200.000 tn), puede llegar a faltar aceite.
En cuanto al almacenamiento privado, COAG ha valorado la primera fase de presentación de ofertas. Según los datos facilitados por la Consejería de Agricultura, han sido 92 las propuestas aceptadas en Andalucía, por un total de 16.150 toneladas, la mayoría de las cuales se almacenarían en la provincia de Jaén (10.164 tn), Málaga (2.994 tn), Granada (1.507 tn.) y Córdoba (1.335 tn). Esta organización agraria considera que, aunque no es una cifra muy alta, no son malos datos, sobre todo teniendo en cuenta que las restricciones de Bruselas sólo permiten almacenar aceite de oliva virgen y virgen extra, algo que reduce mucho las posibilidades, ya que en la campaña 2008/2009 se recogió mucha aceituna del suelo, lo que provocó una gran cantidad de aceite lampante, por el que no se pueden presentar ofertas.
A pesar de todo, COAG anima a las grandes cooperativas a almacenar aceite, porque ha costado mucho esfuerzo conseguir que Bruselas admita esta posibilidad, y porque desde que se anunció la autorización comunitaria, el precio del aceite no ha dejado de subir, aunque todavía no haya superado los umbrales de rentabilidad.
Fuente:agrodigital.com
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