15 enero, 2010

ANIERAC advierte del riesgo de que la marca blanca hunda a los aceites de oliva de mayor calidad

Hasta el momento ha resistido a la presión de la marca blanca, cuya cuota de mercado supera ya el 60% de las ventas de media. Recuerda que las empresas de aceite de oliva tiene en la distribución sólo 12 clientes y de ellos 3 o 4 con una cuota enorme

Las ofertas de aceites de oliva vírgenes extra a bajo precio en las grandes superficies, "muy agresivas", pueden provocar que las enseñas de los principales fabricantes en la categoría premium (los zumos de aceituna de mayor calidad) sean "fagocitadas" por las marcas blancas.

Así lo ha indicado a Efeagro el presidente de la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (ANIERAC), Pedro Rubio, quien ha recordado que, hasta ahora este segmento resistía la presión de la marca blanca, cuya cuota de mercado supera ya el 60 por ciento de las ventas de media.

Ha explicado que, durante años, las marcas blancas han favorecido el consumo "a gran escala" de un aceite de oliva asequible en precio, pero ha advertido de que, a partir de que obtienen una cuota de mercado "importantísima", se crea "un problema" porque muchas empresas familiares que apuestan por sus marcas, la investigación y el desarrollo y productos de valor añadido, se "quedan en el camino".

Ha asegurado que la marca blanca "nunca debería haber llegado a las cuotas actuales" y que se han visto favorecidas por los mensajes que las tildaban de "receta mágica anticrisis" por su bajo coste.

Ha criticado, además, el "desequilibrio" de fuerzas de las empresas frente a la gran distribución, que ha culminado en "un proceso de concentración enorme", y ha abogado por "estar alerta" para que se cumpla la ley y evitar "abusos".

En este contexto, Rubio ha recordado que las empresas de aceite de oliva tienen en el canal de la gran distribución sólo 12 clientes y de ellos, 3 o 4 disponen de "una cuota de mercado enorme" que "nos lleva a todo lo demás: que sector industrial tiene dificultad para pactar condiciones que permitan supervivencia digna a las empresas".

También alerta de la "sobreregulación" del sector, a juicio de Rubio, en lo que "limita en exceso", hasta el punto de que la Unión Europea (UE) prohíbe indicar en el etiquetado de las botellas que el producto es saludable, aunque sí se permite, en cambio, por parte de las autoridades reguladoras de Estados Unidos.

Ha afirmado que la restrictiva normativa comunitaria coloca al aceite de oliva en inferioridad de condiciones y le "penaliza" respecto a otros productos como los lácteos, zumos o vinos, y provoca dificultades para competir.

Entre los principales puntos débiles de las empresas, ha alertado de la restricción de crédito que, en su opinión, ha provocado un mercado "pesado" donde "es más difícil operar", al tiempo que ha demandado la reactivación de los seguros de crédito a la exportación, "que prácticamente han desaparecido".

Asimismo también ha mostrado su preocupación por las consecuencias del "duro" temporal que "ha paralizado" la recolección y provocado "incertidumbre" e "inquietud" sobre la cantidad y calidad de aceite disponible en 2010.

Ha valorado los resultados de las campañas de promoción realizadas en España, mercado comunitario, EE.UU. y terceros países para dar a conocer el aceite de oliva aunque ha puntualizado que el reto ahora es encontrar un "punto de equilibrio" en los precios de venta, que son bajos actualmente, con el objetivo de "asegurar" aceptables beneficios para toda la cadena de valor.

Ha resaltado que las ventas en la UE, uno de los principales mercados a "corto plazo", han experimentado un crecimiento constante durante la última década, mientras que Rusia, India, China y Japón son apuestas de futuro para incentivar el consumo y ha indicado que el sector industrial "piensa que hay que trabajar con constancia y a largo plazo" en República Checa y México para lograr que estos países diferencien los aceites de oliva de los de semillas, que consumen habitualmente, y los introduzcan "poco a poco" en las cocinas locales.

No obstante, ha mostrado su optimismo sobre la evolución futura del mercado porque "se seguirá consumiendo" aceite de oliva, y ha recordado que España no ha generado excedentes desde su adhesión a la UE, a pesar de que ha multiplicado por tres su producción.
Fuente:agrocope.com

2 comentarios :

Anónimo dijo...

Pero es que creen que a los Distribuidores les importa hundir los aceites de oliva de mayor calidad, los Hiper solo quieren aceite normalito para vender mucho a un precio algo más bajo. Se forrarán con sus marcas blancas y por supuesto se cargaran el sector como estan haciendo con la leche.

importexport dijo...

Mas vale que se tome cartas en el asunto.La banalización del aceite de oliva nos perjudica y desvaloriza el producto; tanto en mercados internos como externos